Las musas griegas y Les Luthiers

Algo que me sorprende desde que comenzó esta inacabable y dura crisis es escuchar noticias como la que informaba sobre la manera tan “graciosa” que tuvieron los norteamericanos, británicos, alemanes, franceses, y belgas entre otros, a partir de septiembre de 2008 de referirse a los países mediterráneos europeos mediante el acrónimo “PIGS” que significa en inglés “cerdos”, justificando tal apelativo por ser el formado por las iniciales de los países en inglés: Portugal, Italy (Italia), Greece (Grecia), Spain (España), y según las fuentes, también a Irlanda (en ese caso se referían como "PIIGS"). Igualmente me sorprende la noticia recurrente de que el Consejo Europeo esté planteándose cada cierto tiempo la expulsión (o salida voluntaria) de Grecia de la Unión Europea. ¿Por qué no se dijo nada parecido cuando se supo que Alemania rozaba la recesión económica, recientemente?.

      El motivo de mi asombro ante noticias de este calado es la manifiesta falta de cultura tan asombrosamente desmesurada que se destila de “las mentes privilegiadas” que hayan podido concebir tales ideas. ¿A quién en su sano juicio se le ocurre calificar de “cerdos” a las cuatro naciones más antiguas culturalmente hablando de toda Europa?; ¿cómo puede siquiera alguien atreverse a cuestionarse la expulsión de “la nueva Europa” (la Unión Europea) a la cuna de la civilización que fue Grecia?. Es que es algo que no me entra en la cabeza. No hay nada de nuestra civilización actual que no haya tenido su germen en la Grecia clásica, incluyendo las artes y la democracia. 

 

 En la imagen, diversas noticias e imágenes que se publicaron en la prensa internacional, creando reacciones de protesta en buena parte del mundo. Afortunadamente aún queda gente con clase, como decían en la película “Duets”.

           A  Italia se deben las leyes, muchos estilos arquitectónicos, artistas como Miguel Ángel, Leonardo Da Vinci o Botticelli (por mencionar apenas tres) o el latín del que derivaron las lenguas romances, entre otras cosas. El ejército romano y otros ejércitos posteriores tomaron muchísimos avances y tácticas de los ejércitos de los pueblos de la Península Ibérica, la escritura, la navegación, los megalitos (en Burgos existen dólmenes datados por C14 en más del 6.500 a.C., más de 1.500 años más antiguos que los más viejos del norte de Europa), el románico, arte mozárabe, … por no mencionar todo lo que Portugal y el Imperio Español dejó como legado en América (Estados Unidos, América Central y del Sur), África y Asia. ¿A todo esto se atreven a catalogar de “cerdadas”?.

        Antes de que den rienda suelta a ideas tan absurdas como éstas, les recomendaría que se pasearan por los museos arqueológicos y pinacotecas de sus países y, sólo por encima (sin invertir mucho de su valioso y atareado tiempo), hicieran una estimación del porcentaje que perderían de sus colecciones si estos países “tan cerdos” no hubieran nunca existido ni hubieran protagonizado el avance de la civilización hasta el Renacimiento y tal vez más tarde. En fin, que verdaderamente creo que hay noticias que dicen muchísimo de quienes las ha planteado. Tristemente, el ser humano cada día está más idiotizado y el conocimiento cultural es algo que comienza a ser más bien escaso (en mi viaje a USA y Canadá fueron muy poquitas las personas con las que hablé y que, al decirles mi nacionalidad, no ubicaran mi país en México, para mi sorpresa, no porque me ofenda sino porque sorprende que no acierten ni con los continentes a los que pertenecen los diversos países del mundo). Pero por favor, que no insistan tanto los dirigentes europeos y algunos periodistas norteamericanos en querer mostrar esas carencias. Les rogaría que mejor se ciñeran al consejo de su genial  paisano Groucho Marx cuando dijo aquello de: “It is better to remain silent and be thought a fool, than to open your mouth and remove all doubt” (“es mejor estar callado y parecer idiota, que abrir la boca y despejar toda duda”).

Composición con unos pocos aportes de los numerosos que los países “pigs” han dado a la historia de la humanidad.

          Como digo, tal vez el aporte que más destacaría de Grecia es el de las artes en todos sus conceptos (literatura, teatro, música,…), cada uno con una determinada musa. Mientras que en los textos más antiguos eran 3, como los tres aspectos o “gracias” de la Madre Diosa matriarcal (Aedea, el canto; Nnemea, la memoria debiéndose a ella el nombre de “reglas nemotécnicas” para acordarse de algo; y Meletea, la meditación), conforme la civilización se fue desarrollando, las musas pasaron a ser 9 (Calíope, de la elocuencia y cantares épicos; Clío, de la historia; Erato, del arte lírico; Euterpe, de la música; Melpómene, del drama; Polimnia, de la retórica; Talía, de la comedia; Terpsícore, de la danza y Urania, del estudio de los astros).  Otro rasgo muy destacable griego es ese sentir la vida plena y totalmente, sacándole todo su jugo, incluso aunque con ello se llegue a una total destrucción y vuelta a comenzar. Esta mentalidad la encuentro magistralmente recogida en la última secuencia de la película Zorba el Griego, con ese inolvidable y camaleónico Anthony Quinn (que curiosamente tenía raíces mexicanas) haciendo de vividor griego, riéndose del desastre y bailando.

 

       Está en inglés, así que para los que no entiendan el idioma, Zorba ha invertido todos los ahorros del patrón inglés es la construcción de un teleférico que servirá para agilizar los transportes comerciales. Lo prueban con troncos y la velocidad que alcanzan hace que se destruya todo, huyendo burros de carga, monjes y demás. Zorba dice a su jefe arruinado (2:52): “Jefe, yo tengo que decírselo, porque le quiero, usted lo tiene todo para ser feliz, absolutamente todo…menos una cosa ¡la locura! Tiene que romper la cuerda que nos ata y  no nos deja ser libres…”. El inglés, aturdido, le pide a Zorba que le enseñe a bailar, ya que es lo que solía hacer el griego cuando la pena y depresión lo invadían. Mientras le va indicando los pasos del Sirtaki más conocido de la historia, Zorba le comenta “Pero bueno, Jefe, ¿ha visto usted alguna vez una catástrofe más esplendorosa?” y terminan bailando entre carcajadas. Toda una filosofía de vida propia de los países mediterráneos.

        A propósito de las musas de las artes de la Grecia clásica, dejo uno de los diálogos que más me gustan del genial grupo humorístico Les Luthiers donde se habla de las musas a la vez que se critica sutilmente la ignorancia que cada día es más generalizada en todos los estratos sociales, mezclado todo con unas pinceladas del humor absurdo de los sobresalientes hermanos Marx.

   

         Y para finalizar esta entrada, añadiré la canción en la que los componentes del grupo humorístico se meten en la piel de marineros españoles en “las majas del bergantín”, mirando por…el futuro de Italia, otro de los “pigs” (ver la pieza, para saber a qué me refiero). Como curiosidad, decir que desde marzo de 2013, cuatro de los cinco componentes de este grupo humorístico son españoles (Carlos Núñez, Daniel Ravinovich, Daniel López y Marcos Mundstock han obtenido la nacionalidad española mientras Jorge Maronna, la tiene italiana).